lunes, agosto 22, 2011

Juntaletras

No son las mejores horas para escribir y ni siquiera tengo una visión nítida de la pantalla pero es ahora cuando he sentido la necesidad de plasmar mis pensamientos en estas letras.
Siempre quise ser un escritor de éxito, no uno de esos que mueren escribiendo y cuyos herederos se forran al cabo de los años. Yo quería ser uno de esos que tienen éxito inmediato y disfrutan de él plenamente.

Estudiar para conseguir mi sueño no era algo que me preocupase, cuando estás destinado a escribir tu profesión importa poco. No existe nada ni nadie que te pueda dar lo que necesitas para enfrentarte a la hoja en blanco, ningún truco infalible, ninguna trampa.

Solo eres tu y lo que quieres contar, una especie de lucha épica entre las musas y los demonios de la pereza. Es ahí donde yo fallo, mis demonios son demasiado fuertes.  Sin embargo, hay momentos en los que las ganas de escribir algo consiguen abrirse paso entre toda esa maraña de excusas y pensamientos que no llevan a ninguna parte.

Entonces todo fluye.

Meh.

2 comentarios:

  1. Buh. Stephen King escribe puesto de cocaína o algo parecido, igual es lo que a ti te hace falta. Como el doping de los ciclistas, pero para la creatividad. A él le va bien, mira, ha escrito libros buenos, libros de mierda, pasajes en los que estaba tan drogado que ni si quiera recuerda haberlos escrito... Y ahí esta, ganándose la vida.

    Al menos tú querías ser escritor, yo me he tirado la vida queriendo vivir del cuento. Ser una señora británica snob y adinerada que monta cenas, fiestas y orgías para toda la clase artística del Reino Unido. Supongo que en esas fiestas también habría droga, como en los libros de Stephen King. Viviría en la típica casa Victoriana rellena de muebles Art Deco y coleccionaría arte impresionista, que me encanta. Haría mis pinitos artísticos, pero tras ver que mi talento tiende a cero, me dedicaría a comerciar con cuadros y esculturas (quizá incluso montaría una galería de arte con exposiciones rotatorias).

    Ah, y el perrete es AMOR.

    PD: Tengo el zelevro lleno de caca, menudo comentario me ha salido (lo peor es que alguna traza de verdad sí que tiene).

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  2. Tu comentario es más largo que la entrada en si XD

    Me has recordado a un señor que dice que el asesino de Lennon y Stephen King son la misma persona. Tiene unas teorías bastante raras que sitúan a King en la escena del crimen, así como fotos que recalcan el parecido entre los dos asesinos, el de libros y el de ídolos de la música.

    Este señor recorre los USA en una furgoneta repartiendo panfletos y explicando sus teorías a quien le quiera escuchar. Lo trataré por aquí en un futuro.

    Y bueno, yo quería ser escritor por el superdinero, para hacer una armadura con armas futurístas y repartir estopa por las calles de mi ciudad postapocalíptica.

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